Una mascarilla de tejido es una pieza de algodón, bambú, gasa, celulosa o biocelulosa que está impregnada de ingredientes activos en una concentración muy alta, aunque las puede haber de otros materiales también. Este tejido es aplicado en el rostro limpio y previamente tonificado durante un periodo de tiempo concreto y sus resultados suelen ser inmediatos. Al aplicar el tejido en la piel, este tiene un efecto oclusivo que permite al producto penetrar en la piel sin evaporarse o secarse, haciéndola más efectiva que un sérum o esencia convencional.

Debido a la concentración tan potente de ingredientes activos que poseen las sheet mask, no es aconsejable utilizarlas más de 2 o 3 veces por semana. Además, una sheet mask tiene solo un uso y este debe ser inmediato después de su apertura.

Las sheet mask son un producto estrella del cual cualquier tipo de piel puede beneficiarse. Las hay para todas las necesidades y gustos, son muy baratas y cumplen su función a la perfección. Además, los resultados son visibles inmediatamente con la mayoría de sheet mask, por lo que se convierten en un gran aliado cuando nuestra piel necesita una ayudita extra o cuando queremos estar radiantes para un evento especial.

Hay tantos tipos de mascarillas de tejido como problemáticas y tipos de pieles. Entre sus tipos más famosos encontramos las nutritivas, las hidratantes, las iluminadoras, las calmantes, las equilibrantes y las exfoliantes; pero también las hay reguladoras del sebo, limpiadoras, antimanchas, antiedad, con vitaminas, preparadoras para el maquillaje, etc.

El tiempo recomendado es entre 10 y 20 minutos, siendo el tiempo ideal 15 minutos. Es importante no dejar la mascarilla más tiempo de lo indicado puesto que puede resecar la piel o ocluir en exceso, causando imperfecciones.

Las mascarillas coreanas son las mejores del mercado puesto que son los creadores e inventores de este maravilloso producto. Las empresas coreanas tienen décadas de estudios y pruebas dirigidas a este tipo de producto que les hace imbatibles en comparación con los mercados occidentales que solo llevan pocos años investigando y creando mascarillas de tejido. Además, en cuanto a precio y efectividad, ¡no hay quien los gane!